¡El olor a café recién hecho me hace feliz!. Nunca lo había pensado, pero pese a que no puedo tomarlo habitualmente, el olor del café recién hecho me encanta, ¡me pone de buen humor!.
Y esta es la máxima que me propongo seguir, por mucho esfuerzo que me suponga (que se lo supondrá a una controladora nata):
"Nunca pienso en el futuro. Llega enseguida".
Einstein